El Algarve está lleno de pequeñas y encantadoras ciudades y pueblos que a menudo se pasan por alto cuando uno decide reservar sus vacaciones en la región sur de Portugal. Estas joyas ocultas son realmente sorprendentes, con una belleza natural y una arquitectura que nos recuerda cómo era el país hace medio siglo. En esta lista contamos con 20 recomendaciones de pueblos y ciudades rurales que debes visitar la próxima vez que vengas al Algarve.

Estoi

Estoi es un pueblo en el municipio de Faro que hasta hace poco se conocía como Estói, ya que solo en 2004 el Parlamento portugués cambió su nombre a Estoi. El ambiente tranquilo que se vive en esta localidad te encantará. Pequeña y amigable, a menudo pasa desapercibida debido a las populares ciudades costeras del Algarve. Aquí están las ruinas romanas de Milreu, un importante vestigio de la ocupación romana en las tierras lusitanas.

En esta localidad se encuentra el hermoso palacio de Estoi. Su construcción comenzó en 1840 y terminaría en 1909. Aunque la fachada del edificio es simple, se esconde dentro de la rica opulencia característica de la época (algo que se puede ver en las habitaciones de estuco y las magníficas pinturas de los techos). La sala que más destaca es el gran salón de baile lleno de espejos y pinturas. También son dignos de destacar los jardines del palacio. Hoy en día el palacio se ha convertido en una casa de huéspedes.

entrada principal del palacio de Estoi
Palacio de Estoi. Foto de Algarve Tourist.

Santa Bárbara de Nexe

Santa Bárbara de Nexe es un pueblo en el noroeste del municipio de Faro y el hogar de la hermosa Iglesia Matriz, una de las iglesias más importantes del Algarve. La presencia humana en Santa Bárbara de Nexe se remonta al Paleolítico, hace unos 30.000 años. Los conios, fenicios, romanos y moros también pasaron por el municipio, y  con la reconquista cristiana dirigida por el rey Dom Afonso III, la localidad se integró en el Reino de Portugal.

El pueblo de Santa Bárbara de Nexe también es conocido por la tradición de tocar el acordeón, conservada por sus habitantes, y que atrae a compositores e intérpretes de este instrumento musical de todo el país. La capilla de Santa Catarina dos Gorjões (templo de origen medieval tardío) y los molinos de viento y los pozos de agua ancestrales complementan el patrimonio histórico y cultural de Santa Bárbara de Nexe.

Iglesia de Santa Barbara De Nexe y mar al fondo
Vistas de la iglesia de Santa Barbara de Nexe con el mar al fondo. Foto de Homeaway.

São Brás de Alportel

São Brás de Alportel es un pueblo rodeado por Tavira, Olhão, Faro y Loulé. En el siglo XIX este pueblo se convirtió en un importante centro económico debido a sus plantaciones de alcornoques. Estas plantaciones fomentaron el desarrollo comercial e hicieron de la aldea el mayor productor de corcho en Portugal y el mundo. São Brás de Alportel se encuentra en una zona privilegiada, rodeada de bosques y montañas, que ofrece una vista espectacular del mar y la región circundante.

Fue en esta pequeña localidad donde nació Carlos Gago Coutinho (aunque se registró en Lisboa) y, junto con el aviador Sacadura Cabral, se convirtió en un pionero de la aviación al completar el primer cruce aéreo del Atlántico Sur.

En São Brás de Alportel también hay un interesante Museo Etnográfico del Algarve.

Largo de São Sebastião en São Brás de Alportel
Largo de São Sebastião en São Brás de Alportel. Foto de Região Sul.

Silves

Silves es un pueblo rural en la región del Algarve con 6000 habitantes. Fue nombrado Xelb, Xilb o al-Shilb durante el dominio musulmán y reconquistado por Dom Sancho I en 1189 con la ayuda de una flota de cruzados daneses. Debido a su prosperidad agrícola y su importancia comercial, la ciudad fue la capital del Algarve durante varios siglos.

Silves es una ciudad regional típica con casas pequeñas, estrechas y encaladas, y con una imponente iglesia situada junto al castillo que vigila toda la ciudad. El castillo de Silves es uno de los monumentos históricos más importantes del Algarve. La fortificación tiene la forma de un polígono irregular rodeado por un fuerte muro y fuera de la puerta principal hay una escultura de bronce del rey Dom Sancho I. Una gran manera de ver el castillo de Silves y la ciudad es desde el río, con un paseo desde Portimão a Silves con tiempo para ver la ciudad.

Silves forma parte de esta lista de localidades rurales debido a su naturaleza rústica y salvaje, que hace de la ciudad un lugar desconocido para la mayoría de los turistas que visitan el Algarve.

Silves al atardecer con el castillo iluminado y el río
Silves al atardecer con el castillo morisco y el río.

Sagres

Sagres es un pueblo portugués en el municipio de Vila do Bispo que fue muy importante para los descubrimientos portugueses, ya que fue el sitio elegido por el Infante D. Henrique, principal promotor de la expansión portuguesa en el extranjero, para crear la famosa escuela naval. Sagres es una pequeña ciudad en el extremo suroeste de Portugal y debido a su remota ubicación, da una sensación de fin del mundo a sus visitantes con sus escarpados acantilados, fuertes vientos y la ausencia de vegetación.

En Sagres puedes probar una clase de surf.

Al encontrarse en una ubicación estratégica para ingresar a Europa o África, el puerto de Sagres fue atacado con frecuencia por corsarios, lo que llevó a la construcción de la Fortaleza de Sagres, una imponente estructura de defensa militar erigida en un promontorio.

vista aérea de la fortaleza de Sagres
Fortaleza de Sagres. Foto de Portugalconfidential.

Castro Marim

El pueblo de Castro Marim, situado al margen derecho del río Guadiana, fue ocupado por fenicios, cartagineses, griegos, romanos, visigodos y árabes hasta que fue reconquistado por los portugueses en 1242. Debido a que se trata de una ciudad fronteriza cerca del mar, Castro Marim fue durante siglos un lugar estratégico de guerra en el Algarve.

La belleza natural de Castro Marim conserva un pueblo que parece perdido de la civilización, donde la gente se mueve lenta y pacíficamente. Visitar las salinas de Castro Marim es una excelente oportunidad para conocer más acerca de las costumbres de este pueblo mediterráneo.

vista aérea del castillo y fuerte de Castro Marim
Castillo de Castro Marim y su fortaleza. Foto de Portugaltravel.

Moncarapacho

Moncarapacho es un pueblo típico de Barrocal del Algarve situado entre suaves colinas donde abundan las higueras, almendros y granadas. Se mencionó por primera vez en 1368, cuando el rey Dom Fernando ofreció a João Afonso y sus sucesores una viña con higueras en el área de Tavira llamada Moncarapacho.

Este pequeño pueblo tiene como principales atracciones la Iglesia Matriz, construida en la primera mitad del siglo XV, la Iglesia da Misericórdia, de finales del siglo XVI y principios del XVII, la Capela de Santo Cristo, construida en el XVII y el museo de la ciudad. Si visitas Moncarapacho no puedes olvidar ver el Cerro de São Miguel, que ofrece una de las vistas panorámicas más hermosas del Algarve en una zona que alcanza una altitud de 411 metros.

calle adornada con flores en Moncarapacho
Calle de flores en Moncarapacho.

Alte

Alte es un pequeño pueblo extremadamente encantador del municipio de Loulé. Conserva los techos, las tradicionales chimeneas y las calles pavimentadas en calzada portuguesa.

Fontes de Alte es uno de los lugares más agradables del Algarve, con sus aguas cristalinas del río homónimo escondidas en una zona boscosa de gran belleza y tranquilidad. El lugar de Fonte Grande, adecuado para barbacoas y picnics gratuitos, al borde del río (en un lugar ideal para bucear en la piscina natural), es un verdadero paraíso.

Una fantástica opción para conocer Alte es mediante un safari en jeep.

riachuelo en Alte
Riachuelo en Alte. Foto de Algarve Tourism.

Paderne

Paderne, anteriormente conocido por Paderna (que significa rudo, grosero, duro e intratable) es un pueblo pintoresco perteneciente al municipio de Albufeira. Está situado en Barrocal y ofrece espléndidos paisajes naturales y arquitectónicos, rodeado de exuberantes campos, un río de agua siempre fría y pinos.

Se estima que el castillo de Paderne fue fundado por los almohades (miembros de una dinastía de Marruecos) en la segunda mitad del siglo XII. El castillo tiene una torre de más de 9 metros de altura con una planta cuadrangular que aún se conserva en excelentes condiciones. Los dos aljibes del castillo dan testimonio de los dos momentos principales de ocupación del castillo: el islámico y el cristiano.

pueblo de Paderne
Paderne rodeado de naturaleza. Foto de RegiãoSul.

Bordeira

El pueblo de Bordeira fue fundado por el obispo de Silves en 1464, quien ordenó a los habitantes de Silves que construyeran allí una iglesia. Está ubicado en una región de valor arqueológico (con algunos vestigios del Paleolítico) destacando el silo de planta circular del período de la ocupación islámica. Situada en la impresionante Costa Vicentina, el pueblo de Bordeira es muy fértil, lo que permite a la población vivir de la tierra (y del mar).

En la entrada del pueblo se encuentra la Iglesia da Nossa Senhora da Encarnação. Otra de las atracciones es la playa de Bordeira, considerada una de las más bellas de Portugal por su arena blanca y agua cristalina.

pasarela de bajada a la playa de Bordeira
Praia da Bordeira. Foto de algarveimobiliaria.

Cachopo

El pueblo de Cachopo se encuentra en el municipio de Tavira, en la Sierra do Caldeirão, entre montañas y valles. El aspecto rústico de sus calles y casas típicas se debe al predominio del esquisto. Los habitantes de Cachopo se dedican principalmente a la agricultura, ganadería, apicultura y producción de corcho. En la zona también destacan los trabajos en lino, producción de aguardiente y los embutidos.

Aprovecha la oportunidad de visitar el Museo Cachopo, un museo etnográfico y antropológico que retrata la cultura y las costumbres de la gente del Algarve y los molinos de viento.

dos lugareños sentados al sol en un banco en Cachopo
Lugareños en Cachopo. Foto de mapio.

Ferragudo

El pueblo de Ferragudo junto al mar es tierra de pescadores. Se originó alrededor del siglo XIV, cuando los pescadores que buscaban en el mar el sustento de sus familias decidieron establecerse en el área. Después de ser codiciado por los fenicios y cartagineses, la desembocadura del río Arade pasó a ser dominada por los romanos, quienes dieron gran importancia a la pesca y la industria del salazón de pescados.

Desde Ferragudo puedes contratar un tour en kayak para explorar la cueva de Benagil o embarcarte en un viaje para la observación de delfines.

atardecer en el pueblo de Ferragudo y la bahía
Bonitas vistas del pueblo de Ferragudo y su bahía.

Cacela Velha

Encaramado en un acantilado frente al estuario, el pueblo de Cacela Velha respira historia y nos recuerda a un Algarve de hace medio siglo. En el año 713, durante las campañas de Abdelaziz, Cacela pasó a ser dominio musulmán. En 1240, el pueblo fue conquistado a los moros por Dom Paio Peres Correia. El 24 de junio de 1833, en medio de una guerra civil, una fuerza liberal de 2.500 hombres desembarcaron en Cacela y procedieron a cruzar todo el Algarve y Alentejo para engañar al ejército absolutista y entrar en Lisboa.

Este tranquilo pueblo goza de una gran belleza natural y arquitectónica que se puede observar en las típicas casas encaladas. Además de cafés y restaurantes, el pueblo cuenta con una hermosa iglesia y con los restos de un fuerte del siglo XVIII.

villa de Cacela Velha y Ría Formosa
La bonita Cacela Velha y Ría Formosa.

São Bartolomeu de Messines

São Bartolomeu de Messines es un pueblo de origen árabe, escondido en medio de montañas y arboledas. Es en el área de Messines que las represas de Funcho y Arade almacenan las aguas del río Arade para garantizar el suministro de agua en el Algarve durante los largos y calurosos meses de verano. El poeta João de Deus, inventor de Cartilha Maternal, nació en Messines.

El pueblo aislado de Messines parece detenerse en el tiempo, inmerso en la paciencia ociosa característica de la ruralidad del Algarve.

represa de Funcho en São Bartolomeu de Messines
São Bartolomeu de Messines – Represa Funcho. Foto de rotasturisticas.

Algoz

Se piensa que el nombre de Algoz proviene de la palabra árabe «Al-Gûzz», que designa a una tribu guerrera de Oriente Medio que se habría establecido en el área en el siglo XII. De hecho, Algoz fue un importante asentamiento durante la ocupación árabe debido a su proximidad con Silves. Este pueblo es conocido por su producción de vino, almendras, trigo, higos, aceite de oliva, tomate, coliflor, fresas y cítricos.

La Ermita de Nossa Senhora do Pilar, la Iglesia Matriz, el Granero, la Ermita de S. Sebastião y el Apeadeiro de Algoz complementan el patrimonio histórico y cultural del pueblo.

puestos de utensilios en el mercadillo de Algoz
Mercadillo de Algoz.

Alcantarilha

Alcantarilha tiene vestigios de ocupación humana remota, y su ubicación en la cima de una zona elevada la ha convertido en un lugar estratégico de defensa. Alcantarilha fue fuertemente influenciada por los moros, algo visible en su propio nombre que deriva de «Al-Qantara», que significa «puente». De esta manera, «alcantarilha» significaría «el pequeño puente» en referencia al viejo puente que cruza la ribera de Alcantarilha.

La Capilla de los Huesos, en Alcantarilha, constituye un atractivo diferente de una belleza exótica. Adjunta a la Iglesia de Nossa Senhora da Conceição, la capilla se remonta al siglo XVI. Su interior está cubierto por más de 1500 huesos humanos, que se cree que pertenecieron a los jesuitas que perecieron en la región.

capilla de los Huesos en Alcantarilha
Interior de la capilla de los Huesos en Alcantarilha. Foto de Flickr.

Monchique

La presencia de los romanos en Caldas de Monchique, seducida por las propiedades curativas de sus aguas medicinales, llevó a la construcción de un edificio termal, que a su vez marcó el inicio de la importancia de la zona de Monchique. Con el paso de los años, la importancia de los baños aumentó, lo que hizo que reyes y reinas portuguesas los buscaran con entusiasmo. La denominación Monchique deriva del nombre atribuido por los musulmanes a la cordillera: Munt Šāqir, que significa «Monte Sagrado».

El encanto del pueblo de Monchique se puede sentir plenamente en la mañana de un día despejado, cuando el amanecer ilumina la tranquilidad que se respira en el pueblo, donde no hay horarios ni tráfico; sólo susurros y relax.

En Monchique puedes hacer caminatas, rutas en bici o conocer mejor la montaña con un tour en segway.

vistas desde el punto más alto de Monchique, Fóia
Impresionantes vistas desde Fóia. Foto de Algarve Tourism.

Alcoutim

Desde la era del Paleolítico Medio, Alcoutim ha sido poblada por el hombre. Este pequeño pueblo, bañado por el río Guadiana, ofrece una visión de un Algarve rural olvidado en el tiempo. La arquitectura es típica de un pueblo algarvio, y se compone de casas encaladas tradicionales. El paisaje natural que rodea el pueblo es increíblemente hermoso, combinando el verde de las montañas con el azul del río.

pueblo de Alcoutim atravesado por el río Guadiana
Alcoutim y el río Guadiana. Foto de Cm Alcoutim.

Salir

Se presume que las primeras personas en establecerse en Salir fueron los celtas. Salir es hoy una localidad próspera con base agrícola, que produce almendras, algarrobas, aceitunas, corcho y trigo. El pueblo de Salir es a menudo buscado por los turistas debido a su paisaje notable.

Desde el castillo de Salir tienes una vista panorámica espectacular sobre las verdes colinas y el mar al fondo.

paseo marítimo de Salir
Salir. Foto de Thecrazytourist.

Salema

Salema, donde se encuentra la famosa playa del mismo nombre, es un pueblo de pescadores ubicado en Vila do Bispo, Algarve. Las calles del pueblo son sinuosas y las casas están pintadas al estilo tradicional encalado de la región. El pueblo está situado en la impresionante Costa Vicentina y es famoso por el excelente pescado que se cocina allí, que se pesca exactamente el mismo día que se cocina.

playa de Salema
Salema.
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